Quien no tiene una aromática en casa es porque no quiere… Sí, lamentamos empezar de esta forma nuestro artículo, pero es la pura realidad. No importa el espacio si es interior o exterior; el lugar dónde las siembres: en maceta o en suelo; ni tampoco tu propia experiencia…Tener un huerto de aromáticas es muy fácil.

Además, son plantas con las que podrás disfrutar durante mucho tiempo sólo tienes que aplicar algunos trucos (que sólo te vamos a contar a ti) y listo: ¡larga vida a las aromáticas!

Menta (Mentha)

La menta es una de las aromáticas más populares, entre sus características más conocidas destaca su refrescante aroma y su versatilidad en la cocina. Toma nota de nuestros trucos para conservarla.

¿Dónde plantarla? La menta es una planta que tiende a expandirse rápidamente, por lo que se recomienda cultivarla en macetas o en una zona del jardín delimitada. Además, asegúrate de elegir un lugar con sombra parcial, ya que la menta prefiere evitar el sol directo en climas calurosos.

Riego. La menta necesita un riego constante para mantener el suelo húmedo, pero evita el exceso de humedad, ya que puede provocar enfermedades fúngicas

Poda. Es invasora por naturaleza, así que es recomendable mantenerla en un espacio delimitado para evitar que se propague sin control. Recorta las ramas más largas y las flores marchitas con regularidad para promover un crecimiento más compacto y estimular la producción de nuevas hojas.

Truco. La forma más fácil de conservar la menta fresca es la nevera o también la puedes congelar lo que te ayuda a conservar su sabor. Pero como con el resto de aromáticas también puedes colgar la menta y secarla al aire libre.

Albahaca (Ocimum basilicum)

La albahaca es una planta aromática imprescindible en la cocina mediterránea. Para mantenerla en buenas condiciones:

¿Dónde plantarla? La albahaca prefiere climas cálidos y soleados, por lo que es importante elegir un lugar con al menos 6 horas de luz solar directa al día. Puedes cultivarla en macetas o directamente en el jardín, pero recuerda dejar suficiente espacio entre las plantas para que tengan espacio para crecer.

Riego. Evita el encharcamiento, ya que el exceso de agua puede causar pudrición de las raíces. Un truco útil es regar la planta por la mañana para que tenga suficiente tiempo para secarse antes de que caiga la noche.

Poda. Es una aromática que necesita que hagas podas regulares para evitar que crezca de forma frondosa y se vuelva leñosa. Corta las hojas superiores de la planta regularmente para estimular un crecimiento más compacto y para evitar que florezca prematuramente. ¡Cuidado! Porque si dejas que la albahaca florezca, puede volverse amarga y perder su sabor distintivo.

Truco. Para conservar la albahaca durante más tiempo, puedes cosechar las hojas antes de que la planta florezca por completo. Para mantenerla fresca, coloca las hojas en un frasco con agua, similar a un ramo de flores. También puedes secar las hojas y almacenarlas en frascos herméticos para usarlas en futuras preparaciones culinarias.

Romero (Rosmarinus officinalis)

El romero una planta aromática conocida por su fragancia y sus múltiples usos en la cocina y en la medicina natural. Toma nota para aprovechar al máximo esta planta versátil.

¿Dónde sembrar? El romero vive enamorado del sol por lo que es importante ubicarla en un lugar soleado del jardín. Además, es una planta muy resistente en lugares más castigados por la falta de agua por lo que puede ser una buena opción para jardines de bajo mantenimiento.

Riego. Aunque acabamos de mencionar que es una planta que no necesita mucha agua, necesita un riego regular durante su primer año de crecimiento para establecerse adecuadamente.

Poda. Si vas a podar es importante hacerlo después de la floración, cuando las flores se han marchitado, para no interferir con el proceso de polinización beneficioso.  Recorta las ramas más largas para mantener la forma y el tamaño deseado.

Truco. Si deseas conservar el romero fresco durante más tiempo, puedes cosechar las ramitas antes de que la planta florezca por completo. Luego, envuelve las ramitas en papel absorbente húmedo y colócalas en una bolsa de plástico perforada en la nevera. También puedes secar las ramitas en un lugar fresco y seco, y luego almacenarlas en frascos herméticos para usarlas en futuras preparaciones.

Tomillo (Thymus)

El tomillo es una planta aromática perenne que suele utilizarse como condimento y que tiene numerosas propiedades para la salud…como la mayoría de sus compañeras aromáticas.

¿Dónde sembrar? El tomillo necesita al menos 6 horas de luz solar directa al día para crecer de manera saludable.

Riego. Es del club de las aromáticas más resistentes por lo que puede soportar períodos cortos de sequía. Es preferible regar el tomillo solo cuando el suelo esté seco al tacto, evitando mojar las hojas.

Poda. Es importante podar el tomillo para evitar que se vuelva eso sí, siempre después de la floración para no interferir con la producción de flores. Recorta las ramas más largas y desgastadas para mantener un crecimiento compacto y estimular la producción de nuevas hojas.

Truco. Cosecha las ramitas antes de que florezca por completo, envuélvelas en papel de cocina húmedo y guárdalas en una bolsa de plástico perforada en la nevera. También puedes secar el tomillo colgando las ramitas boca abajo en un lugar fresco y seco, y luego almacenar las hojas secas en frascos herméticos.

Recuerda que cada planta tiene sus propias necesidades, por lo que es importante investigar sobre los requisitos específicos de las plantas aromáticas que decidas cultivar. Con estos trucos simples, podrás disfrutar de tus plantas aromáticas durante más tiempo y añadir un toque especial a tus recetas.