Normalmente cuando nos lanzamos a crear nuestro huerto lo primero en lo que pensamos es en plantar frutas, hortalizas o verduras. Pero ¿has pensado en las flores? Existen muchos tipos de plantas cuyas flores son comestibles y podrás utilizar en tus ensaladas o para aderezar aliños, y que además pueden ser un gran aliado para cuidar tu salud.

La albahaca, el alhelí, las capuchinas…son algunos ejemplos pero existen infinidad de ellas. Por eso hemos elaborado la guía perfecta para que conozcas al detalle las peculiaridades de cada una de ellas, toma nota.

Albahaca

La albahaca es una de las plantas aromáticas más populares. Su característico aroma hace que ensaladas, salsas o pastas se conviertan en algo único. Pero además, es muy fácil de cultivar en macetas y jardineras. Cuenta con una buena cantidad de variedades cada una de ellas con aromas, sabores y colores diferentes y únicos.

Normalmente solemos utilizar sus hojas pero la flor de la albahaca también es comestible. Su sabor te puede recordar la potencia del clavo o el curry  por lo que debes tener cuidado y utilizarlas con moderación ya que su sabor es muy intenso.

Esta planta herbácea se ha usado tradicionalmente para mejorar la digestión, combatir el insomnio, la fatiga y la ansiedad, pero además tiene un efectivo poder antibacteriano y antiinflamatorio.

Antes de comerlas sumerge las flores en un recipiente con agua y sécalas agitando suavemente.

Alhelí

El alhelí es una planta que produce una bella floración en forma de ramillete. De colores púrpura, lilas, amarillos aunque el más común es el alhelí de color blanco.

La flor del alhelí se suele utilizar como condimento dulzón pero su mayor atractivo es que posee un toque picante que te va a sorprender. Será la compañera perfecta en postres dulces y sándwiches ligeros porque son bastante aromáticas.

Para ayudarnos con nuestra salud se utilizan principalmente sus hojas y semillas que  puedes tomar para reforzar y estimular el sistema cardíaco pero sin consumir altas cantidades ya que pueden resultar tóxicas. Es también efectiva para el dolor de cabeza, haz un infusión de con dos o tres hojas secas.

Esta misma infusión la podrás utilizar como tónico para la piel, te ayudará a eliminar las manchas y erupciones y también te ayudará en heridas y raspones, porque contribuye al proceso de cicatrización.

Para poder emplear las flor del alhelí debemos sumergirla en agua y agitarlas para que se queden bien limpias y listas para consumir.

La característica principal del aliso es su peculiar sabor a miel con trazos picantes lo que le hace muy apropiado para acompañar ensaladas, sopas frías o, incluso, tortillas.

Aliso

Estudios científicos han demostrado que el Aliso facilita la digestión y puede ser un buen complemento si quieres cuidar la línea. Además se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y diuréticas.

Este tipo de flores debemos lavarlas bien para poder consumirlas, sumergidas en agua durante 1 hora y bien escurridas para poder disponerlas en nuestros platos y darles un toque especial.

Antirrino

El antirrino o flor boca de dragón tiene una floración de colores rojos, blancos, rosados y granates. La flor es peculiar por su forma ahuecada, lo que le otorga el curioso nombre que tiene.

Si eres un amante de la mostaza te recomendamos que pruebes sus flores quedarán perfectas como guarnición o aderezo para carnes. Pueden tener un sabor suave o, a veces amargo como sucede con la mostaza.

La boca de dragón es una planta medicinal  que tiene propiedades astringentes, diuréticas y antiinflamatorias, entre otros beneficios.

Tenemos que tener en cuenta en eliminar la parte de color verde junto con los estambres que son, en realidad, los que le confieren ese sabor amargo.

Begonia

La begonia es una planta de gran popularidad por su abundante floración y la cantidad de colores que podemos encontrar en sus variedades.

Sus flores tienen el sabor ácido del limón, pero además una textura crujiente que aportará un toque sofisticado a tus platos. Utilízala para acompañar sándwiches o ensaladas, o para elaborar postres o simplemente como topping en tus yogures, dándoles una interesante nota de color.

Entre las propiedades medicinales de las begonias, destaca su efecto antioxidante. Además, actúa como remedio para las hemorroides o varices. Sus flores te aportarán vitamina A, B, C, D y E

En este caso solo los pétalos de la begonia son comestibles pero hay que tener en cuenta que contienen ácido oxálico y, por lo tanto, deben consumirse con moderación. Al igual que otras flores comestibles sumérgela en agua y escúrrela antes de usarla.

Caléndula

La caléndula tiene unas llamativas flores de color naranjas con un sabor ligeramente picante que combina a la perfección con panes y sopas.

Su color tan intenso nos permite emplearla como un sustituto económico del azafrán, utiliza su pétalos frescos o secos para tus platos de arroz o de pasta. Además se suele utilizar para aromatizar el vinagre y si quieres, pero con moderación, puedes consumir las hojas tiernas en ensalada.

La caléndula es muy recomendable para curar heridas o tratar cicatrices, además ayuda a combatir la vista cansada. Una infusión con caléndulas es ideal para tu piel puedes utilizarla como tónico natural y con ellas puedes crear tu propio bálsamo labial.

Ahora, si quieres puedes empezar a probar cada una de ellas y preparar nuevos platos. Por cierto no nos pierdas de vista porque en breve te contamos más sobre las flores comestibles. Y si necesitas inspiración puedes visitar Flower Gourmet en nuestro blog, seguro que te vamos a sorprender.

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